Esta propuesta está
basada a partir del concepto de medicina preventiva.
“El
arte como forma de sanación y armonización del ser”
Los Mandalas actúan equilibrando
los chakras por medio de los colores y haciendo meditar el lado lógico de
nuestro cerebro a través de las formas geométricas sagradas. El Mandala envía
impulsos a la mente interna llegando a los receptores del cerebro donde se
procesa y se obtienen diferentes reacciones.
El mandala posee un principio
ordenador en su diseño, que ayuda a expresar nuestros anhelos o expectativas,
de este modo creamos una estructura interna armónica. Podemos, así, conectar un
momento de cambio en la vida con la creación de un mándala. Y nos servirá para
explorar a través de la expresión plástica procesos internos latentes.
El trabajo con mandalas se está utilizando en
ámbitos diferentes. En la pedagogía hay experiencias muy interesantes, una de
las iniciadoras del coloreado de mándalas ha sido Marie Pré, una pedagoga
francesa que basándose en los actuales conocimientos de
la Neuropedagogía, ha expandido el uso del dibujo centrado o mándala
para que los escolares no estén tan dispersos en las clases.





























































